lunes, 24 de noviembre de 2008

DPP (Técnicas de autoprotección)


Tan fundamental como el conocimiento del ordenamiento jurídico, es el entrenamiento de técnicas policiales que hagan compatibles el uso de la fuerza con el derecho inherente que tienen todos los ciudadanos. El uso proporcional y "legal" de la fuerza.
Tras la lectura de la ingente cantidad de normas que regulan esa fuerza, no es difícil entender que adquirir esas técnicas policiales se convierte en casi un arte. Un arte fácil de adquirir, a pesar de lo que se pueda pensar.
La Defensa Personal Policial debe, por tanto, estar dentro de nuestra formación contínua. Pero no sólo ésto, sino que la Instrucción Policial debiera ser una de las actividades que la Administración ejecute dentro de los planes de formación colectiva, tanto en la Guardia Civil, como en el resto de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad. Porque el policía preparado, es el que mejor servicio brindará a la población de entre todos los policías.
Si bien un policía entrenado de forma particular en DPP pudiera sentirse más amparado en situaciones hostiles, de nada, o de poco le servirá, si su compañero/s no está a la altura de las circunstancias de forma tal, que lejos de ser un componente de apoyo, resulte ser una carga. Y el momento de la situación hostil, no es el mejor para coordinarse. Ese momento debe ser anterior incluso a la ejecución del servicio. Debe ser un momento previo, planificado dentro de los planes de Instrucción Policial.